En el Parlamento catalán se ha presentado un proyecto de ley que suprimiría tres de las cuatro formas de correbous existentes. Al mismo tiempo, el debate sobre la fiesta de la tortura de animales se está intensificando entre la población de las regiones afectadas, ya que varias personas han publicado fotos y vídeos que documentan esta crueldad. Estas imágenes han desencadenado una enorme ola de indignación en las redes sociales y en los medios de comunicación catalanes. Por lo tanto, los partidos políticos están bajo una presión masiva. ¡Esto es algo bueno! La Fundación Franz Weber está trabajando para que la ley que prohíbe los correbous entre en vigor en 2023.